miércoles, 10 de noviembre de 2010

¡MIEDO!

Llegamos a aquella habitación, entramos los dos. Se te veía tan seguro de ti mismo, que envidia me dabas y me das.
Fue, sentarme en el rincón de siempre, y empezar a caer en tus manos de nuevo.
Que si un beso fugas que si una mirada llena de lujuria, algún bocado "inocente", hay que hacer las cosas, si, pero sola, por una misma, sin ayuda...
Mi cabeza luchando contra el deseo de tenerte, de fundirnos, de llegar a ser uno.
Un beso llega, el esperado. Para tu gusto, tarda un poco un llegar, para mi, fue muy duro conseguirlo.
Satisfacer a la otra persona, es muy importante, pero sabes satisfacerse a uno mismo con compañía de otra persona, no tanto.
A ver que hago, para saltar ese peldaño que obstaculiza todo mi ser, ese peldaño para conseguirte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario